Revista FUERZA NUEVA, nº 618, 11-Nov-1978 |
Revista FUERZA NUEVA, nº 618, 11-Nov-1978 |
Artículo de 1970
d) Entraña tan gran dificultad como se pregona el hacer que el pueblo de Dios tome en la liturgia toda la parte activa que ella le reserva, desarrollándola en latín, salvar las normas que fije la jerarquía –hoy, las lecciones y pasajes evangélicos de la Misa- por medio de publicaciones bilingües y, sobre todo, por la previa traducción, hecha vida, en la palabra del pastor? Revista FUERZA NUEVA, nº 167, 21-Mar-1970 |
Para
demostrar esa afirmación no hay más que conocer su obra. Lo que la Reina hizo
durante los treinta años de su reinado demuestra palmariamente que poseyó en
grado sumo las grandes virtudes del gran político. La virtud
fundamental del gran político es la prudencia. No le deben faltar la
justicia, la fortaleza y la templanza, pero en la reina Isabel sobresalió la
prudencia. Ha sido Felipe II quien ha pasado a la historia con el sobrenombre
de “el Rey prudente”, pero también la reina Isabel hubiera merecido llevarlo.
José Antonio
dijo que “a los pueblos no los han movido nunca más que los poetas”. La Reina
Católica movió al pueblo español. ¿Con qué clase de poesía? Otra gran
virtud política es, por ejemplo, la previsión. En ella sobresalió la reina
Isabel. El gran genio que fue Napoleón no tuvo esa virtud y por eso, a su
muerte, se derrumbó el gran imperio que soñó para su país. El imperio fundado
por Isabel no murió con ella, sino que, gracias a su previsión y a pesar de las
circunstancias adversas, se mantuvo durante una centuria. Y fue santa.
No ha sido canonizada por la Iglesia, ni puede que lo sea próximamente porque
no soplan por ahí los actuales vientos de la historia ni los de la Iglesia. Revista FUERZA NUEVA, nº 147, 1-Nov-1969 |
Artículo de 1967
Por RAFAEL GIL SERRANO.-Director Central de la Hermandad de Campeadores Hispánicos UNA PREGUNTA MUY SENCILLA 2. ° Definíamos la HISPANIDAD
como TODO LO QUE GIRA ALREDEDOR DE LA IDEA DE HISPANIA EN FUNCIÓN DE SU DESTINO
PROVIDENCIAL. 3. ° Arrancábamos del hecho de la existencia de HISPANIA, cuyo
AUTOR supremo es Dios, quien le ha señalado una FINALIDAD trascendente en la
HUMANIDAD, a la cual llamamos DESTINO. 4.° Por último, formulábamos el TRIPODE sobre el cual podía apoyarse
nuestra FILOSOFIA: a) HISPANIA existe, b) DIOS es el AUTOR de HISPANIA. c)
HISPANIA tiene un DESTINO (7). de la palabra» (11) y «La lucha contra la palabra Hispanidad» (12). Todavía quedaron algunos puntos necesitados de aclaración antes de llegar a una solución definitiva y que pronto dilucidaremos si Dios quiere. LA HISPANOSOFIA (2) En la poesía extremeña «El Cristu Bendito». (3) Manuel García
Morente. «Ser y vida del caballero cristiano». Conferencias pronunciadas en la
Escuela Naval Militar de San Fernando el año 1941. Ediciones Juventud de Acción
Católica. Madrid. 1945. Páginas 8-9. (4) Doctor P. Torró.
«Filosofía de la Hispanidad». Biblioteca «Paz y Bien», dirigida por los padres
franciscanos de Valencia. Imprenta Católica Casals. Barcelona. (5) P. Juan Bautista.
Gomis. «Doctor y mártir». Biografía del P. Torró, franciscano. Prólogo de
García Sanchiz. Madrid, 1942. Página 128. (6) Id., id. Página
180. (7) «El trípode
filosofal hispánico». ¿QUE PASA?, núm. 144; l-X-66. (8) «Del Hispanismo al
Iberismo, y no Hispanidad, sino Iberidad». ¿QUE PASA?, núm. 41; 8-X-64. (9) «Hispanidad e
Iberidad. Carta abierta a Roberto G. Bayod». ¿Qué PASA?, núm. 47; 19-XI-64. (10) ¿QUE PASA?, núm.
147; 22-X-66. (11) Id., núm. 152;
26-XI-66.
(12) Id., núms. 161,
28-1-67, y 162, 4-II-67. Revista ¿QUÉ PASA? núm. 203, 18-Nov-1967 |
Artículo de 1967
Estas
determinaciones pontificias no debieron tener un éxito muy rotundo, que
digamos. Porque los curas franceses persistieron en su actitud, y su ejemplo
pasó a España. Cosa ya desfasada, pues hace ya muchos años que los españoles
habíamos dejado de ser imitamonas de los franceses. Y así surgieron en estos
años, acá y allá, en Barcelona y Madrid principalmente, curas cerrajeros,
curas electricistas, curas albañiles, y hasta un cura taxista en Madrid,
trabajando en «taxi» propio, lo que en medio de todo hay que alabar, porque
más sincero y menos hipócrita es dar la cara y trabajar en «taxi» propio que
no poseer en propiedad uno o varios taxis; y para disimular la cosa pagar a
un asalariado para que lo trabaje, como hacen algunos reverendos presbíteros
que conocemos. GARCINUÑO |
Artículo de 1978
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Y, en efecto, pocos líderes como José Antonio, han anhelado tan humana y profundamente el evitar que la política muriese en las meras estructuras de lo puramente administrativo, ni los sueños ni las ilusiones de todo un pueblo terminaran en la burocracia. Y es que, al mismo tiempo, pocas veces ha existido en España un líder político en el que perfectamente se matrimoniasen, como en José Antonio, la valentía y la lucidez. Justamente, se ha dicho, en sus artículos se observa una sólida formación y una dialéctica dura e inflexible; en sus discursos, facilidad y emoción. Pero, precisamente, fue en sus debates parlamentarios en donde su figura nos ofrece las dimensiones más colosales de su valor, de su finura estética y de su agilidad mental. Desde las páginas de los periódicos que con tanto esfuerzo fundó, desde las tribunas públicas más selectas -como la del Ateneo y la del Círculo Mercantil-, desde el Parlamento o desde el montículo aldeano, impartió siempre su lección serena y ejemplar, a saber: que si una generación se debe entregar a la política no se puede entregar con el repertorio de medio docena de frases con que han caminado por la política otras muchas generaciones, y hasta muchos representantes de ésta. En José Antonio la renovación es constante. |